Cuero irlandés
Es una de esas mañanas ásperas y gélidas. El sol apenas logra asomar entre densos nubarrones grises. El aire es vivo pero seco y el viento se enrolla bajo mi ropa. El cierzo maltrata la hierba que se aferra a mis botas. Entro en las caballerizas y al abrir las puertas, libero aromas de cuero, madera, ámbar y miel. Su olor milenario es claramente distinguible en la atmósfera de una mañana gélida.
Mi caballo relincha suavemente. Es el perfume de su libertad. El cuero atrae al viento, la hierba se calienta al contacto con la madera.

Para componer esta fragancia con el carácter irlandés, caballeresco y ardiente, se fusiona el mate, el haba de tonka y el ámbar con las atmósferas de la turba, verdes y amaderadas, de este país maravilloso.
Irish Leather ha revestido su traje de viento, transitando con confianza por una pista elegante. Deja atrás una estela orgullosa.

Notas Olfativas:
Pimienta rosa, esencia de salvia romana, baya de enebro, absoluto de mate verde, esencia de cerrillo, concreto de iris, absoluto de haba de tonka, acorde de piel, esencia de abedul absoluta, acorde de ámbar.